Happy Summer Vacations, Night Creatures!

Vi como me escupía y me retorcía la muñeca, por temor a que me rompiera el brazo, la solté, me limpié su esputo de mi rostro, yo antes no me había enfrentado a situaciones como éstas, pero no había ya nadie alrededor, sino que era como si estuviésemos aquí para pelear, lo que a mí no solía gustarme demasiado, pero no iba a dejar que hiciera daño a nadie más. -La única basura que hay aquí, eres tú. ¿Quién eres y qué haces aquí?-le pregunté.

No iba a luchar, ahora que estaba conmigo, solo esperaba que no atacase a más humanos, tal vez fuera una nueva vampira enviada por los originales. -¿Estás con Elijah y los originales?-le pregunté nuevamente. Si era enemiga que es lo que parecía, igual me daba si estaba con Elijah o iba ella sola, trataría de retenerla. Esperaba que Damon o Stefan me vieran y viniesen a ayudarme.

No podía creer como la sartén había dado la vuelta a la tortilla, el brujo se había atrevido a atacarnos a mí y a mi hermano con una bandada de cuervos que, penosamente intentaron atacarme, pero acabé fácilmente con ellos, pero observé como Reichen desaparcía, pero me daba igual, pues solo con un brujo me sobraba, y me quedaban dos.

Me lancé con fiereza sobre la cazadora y la cogí del cuello, posando mis colmillos en su piel pero sin llegar a atravesarla, estaba preparando mi plan B, tener un rehén para obligarles a hacerme caso ya que el que importaba en esta situación era yo, no ellos.

-Queridos, me gustaría volver al tema principal de esta noche tan hermosa, que es hacer recuperar mi cuerpo, así que empezamos ya o mando a mis híbridos a que continúen masacrando lo poco que ya queda por masacrar, están todos controlando a vuestros amigos y ya me ando cansando.-dije mientras mantenía quieta a la cazadora.

Finalmente me solto, por lo menos no era tonta y se dio cuenta de que no andaba con bromas.
Se limpio mi saliva, y yo me quede esperando alguna reacción ante lo que habia hecho, pero no ocurrio nada, pero tampoco se movio del lugar.
Me llamó basura y luego pregunto sobre mi.
En serio pretendes que me presente?No soy estupida

Dije entre risas, ¿quien en su sano juicio se presentaria a quien intentaba matarla?

Luego pregunto si estaba con no se quien y no se cuales.
¿acaso es necesario saber quienes son esos?¿o permanecer a un grupo?

Pregunte mientrás me cruzaba de brazos.
Daba la sensación de que buscaba o esperaba alguien, pues no se iba de mi lado, pero tenia cierta distancia prudente.
Además si añadimos que al parecer todos iban en grupos, ahora era una presa fácil.

esperas a alguien preciosa, o puedo seguir por mi camino?

Si había que describir la situación con una palabra esa era "mal". Todo estaba completa, absoluta y llanamente -mal- La manera en que se iban desarrollando las situaciones en la mansión Cromwell no daban lugar a nada más. Pero de algo se debía estar seguro y eso era que se estaban expresando voluntades cuya existencias pocos conocían. Poderes mucho más fuertes y antiguos que daban indicio de un panorama mucho mayor en Mystic Falls. Un acto que aún no se presentaba en todo su esplendor mas recién se abría el telón de la obra. Meredith entró en escena para ser capturada rápidamente por el peor de los Originales. Aleksand por su parte lo dejó ser, centrándose principalmente en el accionar del hechicero incluso mostrándose cooperativo a ceder una mínima parte de su magia para contentar a la peste que era aquél vampiro. Una escoria creyéndose superior por enfrentarse a un par de mortales, menudo chiste. Habiendo terminado su precioso ritual esto solo dejo en evidencia para el rubio los retorcidos, asquerosos y repulsivos hilos que entramaban la existencia de Niklaus Mikaelson. Tuvo un fuerte impulso y la necesidad de destruirlo en el acto pero tenía otras cosas en las que preocuparse más por lo que se limitó a dejarle una clara advertencia al Vampiro Original- Podría importarme menos tus pequeños e insignificantes planes Niklaus, no mereces siquiera ser llamado una piedra en el zapato. Eres misero en tu existencia, estas absolutamente solo y tu mira presencia es aborrecida por este mundo. Clamas ser intocable, todopoderoso, pero no eres más que una garrapata que se ha aprovechado de la bondad de la magia por mucho tiempo, quizás demasiado. Haz un favor a todos y desaparece- Cansado de él, Aleksand se dio vuelta para mirarlo a los ojos y caminar hacia el vampiro. Sus ojos plateados se clavaban como miles de agujas en su mirada y señaló su pecho con su dedo indice- Pero déjame decirte que le tocas otro cabello a Meredith, Elena o cualquiera de los presentes y te prometo, con los cielos de testigo, que jamás tendrás paz. No habrá rincón en el universo donde puedas esconderte y te recuerdo, tu clase no conoce infierno o paraíso, el destino que te aguarda es la nada absoluta. Olvidado para siempre, en cuestión de tiempo nadie siquiera recordará tu nombre en este mundo. Te invito a intentar otro de tus trucos, y conocerás verdadero miedo- Estaba lo suficientemente cerca para que su dedo tocase a Niklaus y lo empujase con este haciéndolo retroceder a momento que volvía sobre si mismo para dirigirse al hechicero rebosante de magia oscura.

Esta vez era James quién se acercaba peligrosamente al cazador para darle una buena descarga. No podía decir que no la sintió y que hasta incluso le hizo perder la percepción de su entorno un momento pero era necesario mucho más para moverlo de su lugar. Su "hermano" retrocedió, un movimiento inteligente o aquella demostración le hubiese costado muy caro- No tienes derecho de llamarme criatura, demonio, pues tu existencia se compara a la de la basura que osa llamarse maldad por este pueblo. Siendo sincero, me dan pena, no tenéis razón de ser o motivo para vivir, vamos que ni siquiera son capaces de crear motivo suficiente para que os aplaste ahora mismo. Voy a dejarlo en claro,siendo la Luna testigo de mis palabras, ¡No os permitiré más andar a sus anchas por Mystic Falls usando inocentes para propio entretenimiento. Si es necesario os daré caza a todos y cada uno de ustedes, como los animales que son, y los volveré al maldito agujero de donde salieron!- Las palabras del rubio resonaron por todo el lugar dejando bien en claro su posición al respecto. Era denotable que lo seres sobrenaturales en el pueblo no tenían idea de límites y quien solía responder al nombre de Aleksand sabía muy bien como establecerlos.

El chico aún recordaba como sonreír, la bondad, el cariño de cada uno de los lazos que había establecido desde su llegada y de hecho esa era la fuerza que estaba utilizando para mostrarse como una gran fortaleza en un lugar lleno de oscuridad. Quizás fuese el destino, quizás una coincidencia pero él era el guardián de Mystic Falls y ahora no existían cadenas para retenerlo. El más mínimo acto de rebeldía por parte de los presentes sería capaz de desencadenar la perdición de su propio ser. Esto ya no era un juego en donde sus amigos eran las piezas del tablero de los vampiros, tarde o temprano se darían cuenta que el cazador no era un enemigo a ser subestimado, no más.

La parejita de tórtolos no se molestó en prestarme mucha atención y dejaron que la bruja volviese a mezclarse entre la multitud mientras su antiguo cuerpo yacía tirado a un lado de lo que era el nuevo estacionamiento en llamas de la mansión. Me encantaba el panorama, la gente no dejaba de correr, algunos auxiliando y otros en busca de auxilio. Los gritos, el aroma, la desesperación que llenaba el aire era tan dulce y suave como el pétalo de una rosa negra. Única y casi insuperable. Estaba a punto de volver a ingresar a la casa cuando un par de personas pasaron a toda velocidad a mi lado, cada uno con un aroma más particular al anterior. Uno tenía toda la pinta de ser ingles, otro de estar enfermo y el último una mole de cabello rubio, todos desaparecieron tan rápido como habían llegado en distintos métodos que llamaron mi total atención por lo que desistí de mi idea de buscar entretenimiento dentro cuando era obvio que estaba aún allí fuera.

Decidí seguir sus aromas que ya estaban demasiado lejos para ser algo normal y los tres tenían algo que me interesaba en demasía. Volví hasta los bosques para aproximarme a su nuevo lugar de encuentro desde allí, completamente silencioso. Minuciosamente cuidadoso observé la escena desde la rama de un árbol cercano, todos estaban demasiado ensimismados para si quiera percatarse de mi presencia. El chico rubio era quién poseía el aroma más dulce e impregnable. Su esencia era tan fuerte que hizo estremecer cada una de mis colas invisibles. El chico aparentemente inglés tenía un olor más cítrico, ácido y fuertemente masculino mientras que el tercero... de inmediato se dibujó una gran sonrisa en mi rostro. No podía ser cierto, era demasiado bueno para ser verdad. Parte de él olía a zorro ¿Qué digo? Estaba absolutamente marcado por un Kitsune, y no cualquiera sino el mismísimo Lykaios. La Dama Fortuna realmente debía adorarme para llenarme así de sus bendiciones. Con el chico en mente rápidamente me olvide de los demás maquinando el plan perfecto para joderle la vida al guardián. No es que lo odiara pero quería saber la extensión de su poder y acciones como también a cuanto podía llegar, después de todo jamás se enteraría del causante. Porque ya tenía en mente que hacer.

Reichen, como lo llamaron, tenía su propio espectáculo para dar. Pajaritos por aquí picotazos por allá, tuve que aguantarme la risa ante el show para no delatar mi posición. Y allí se me dio la oportunidad perfecta por lo que tomé una pequeña llave que llevaba en el bolsillo trasero de mi pantalón y la giré apuntando al árbol a la que el hechicero se acercaba. Un portal de ida a la dimensión oscura, nadie podía sospechar nada, nadie podía seguirnos y tendría la libertad divertirme con él cuanto quisiese. Después de todo, yo tenía la llave y soy su único señor. Le seguí rápidamente para encontrar al chico perdido en uno de los paramos tan lúgubres y asquerosamente desérticos. Nada vivo a kilómetros a la redonda, pero uno de los distritos no estaba lejos y por supuesto yo sabía como llegar allí. Dejé que el rojo chispeante en las puntas de mi cabello aflorara y dí vueltas alrededor de el chico que en primera instancia no se había dado cuenta que estaba yo allí- Vaya, vaya, parece que te has perdido jovencito. Dime, ¿Tienes idea de donde te encuentras? - le pregunté divertido aún jugando con la llave en mi mano, tenía que saber que relación tenía con Lykaios, mi diversión dependía de ello. La mansión ya estaba lejos y posiblemente ya nadie nos extrañaría porque lo mejor era dar a Reichen por muerto.

Realmente estaba disfrutando con lo que estaba viendo, era realmente divertido ver como dos aliados ahora peleaban entre ellos porque, al parecer, ese brujo, James, parecía estar poseído por una magia oscura, que como pude ver, me era muy útil, pues comenzó a reconstruir mi cuerpo, lo hilaba cual sastre hilaba una perfecta camisa, ya casi estaba, podría volver a mi actual cuerpo y olvidarme de todo lo sucedido, aunque eso último no lo iba a hacer, no pensaba desaparecer del lugar más mágico de la tierra.

-Claro, si yo solo permanezco aquí para recuperar mi cuerpo e irme con mi familia a otra parte, no me interesa Elena ya, por lo que podéis ver, es ahora una vampira.-dije soltando una risita. Ahora solo me importaba que acabasen de reconstruir el que siempre había sido mi cuerpo, no e importaba nada más. Miré como ambos amigos peleaban nuevamente. Solté a la humana y me dirigí a ellos. -Dejad las peleas para luego y ahora acabad lo que estáis haciendo o no seré dueño de mis actos no sé si queda claro la verdad. -les dije con mis ojos furiosos pero en cambio, con una sonrisa en mi rostro.

La pelea de ambas chicas por la atención del vampiro le ponía bastante, para qué negarlo, pero ahora no quería problemas con sus fans. Simplemente quería salir de aquí con Klaus muerto.Todo era tan confuso paara Damon. Oía gritos de todos y olía toda clase de olores extraños. Quería actuar pero algo pasaba en su cuerpo. ¿Verbena? Él estaba acostumbrado a ella pero en grandes dosis podía hacerle efecto aún.-No te separes de mí.-dijo en un leve susurro hacia Valerie, la humana, mientras la híbrida lo llevaba por toda la casa.

Quería encontrar a Elena pero ahora mismo sabía que estaría con Alek, Meredith y demás. Su prioridad ahora era matar a Tyler,s sí, matarlo. Su nueva amiga la híbrida lo guiaba a través de esa enorme casa hasta que recorrieron todo.-Dime que pretende tu amo Klaus.-dijo enfadado sabiendo que el término "amo" molestaría a la rubia. Luego miró a su acompañante humana.-No te pasará nada.-sonrió intentando tranquilizarla aunque sabía que podría salir herida facilmente siendo una simple humana. Elena vino rapidamente.-Elena, me encuentro mareado. Creo que han echado verbena en las copas en grandes dosis y me encuentro fatal.-dijo mareado. Ahora que se fijaba comenzó a ver gente herida.-Valerie...-miró a la morena.-Ayuda a Elena con los heridos por favor. De repente apareci´Kathrine.-La que faltaba-dijo intentando oir todo.-Debemos detenerlo ya.-amenazó pero una vampiresa apareció para comenzar una pelea con Elena.

Eso enfadó a Damon que en un segundo se colocó frente a la nueva agarrándola del cuello para luego empujarla hacia la pared.-No me jodas...¿tú tambien vienes a dar problemas pelirroja?-miró con una rabia total en su mirada. Se encontraba mal pero eso no debían notarlo los demás y menos sus enemigos.-Katherine, ¿puedo confiar esta vez en ti? Necesito que me digas donde se encuentran y si esta vez mientes juro que te mato.

Al escuchar las palabras de Damon me tranquilicé, parecía que Damon se encontraba un poco mareado, me decía que todo iba a estar bien y que yo lo estaría pero ¿Porqué me lo decía? ¿Es que habían más vampiros en esta cuidad aparte de Damon? Solo sabía de su existencia, pero no pensaba que habrían más de uno.
Me acerqué a Damon y suspire -Damon por favor. Explícame todo lo que está pasando, porque no estoy entendiendo nada de lo que pasa- Cuando escuché lo que me había dicho. ¿Que cuidara de lo que estaban heridos? Me crucé de brazos y miré a Elena, a la que me había dicho que quería que le ayudara, suspire y me relaje mirando a la simple humanucha que tenía delante que se llamaba igual que yo.
¿Cómo es que era la única que no sabía nada de ese tal Klaus o algo de eso? ¿Cómo es que Elena sabía cosas de Klaus más que yo? ¿Cómo es que era que la rubia humana supiera más que yo? No me gustaba eso, siempre Damon me escondía secretos y no me gustaban las mentiras ni nada por el estilo.
Miré a Damon y me acerqué tratando de que Elena y la rubia no me escucharan -Damon. ¿Qué está pasando? Solo dime algo para poder entender para que cuido a la gente ''herida''- Dije.

Cuando me quise dar cuenta ya no era la mano de la vampira la que me sujetaba , esta vez se trataba de un hombre, que no estaba nada mal, seamos sinceros.

Vaya, parece que la vampirita a llamado a su noviecito

Dije con sarcasmo.
Como le habia hecho a su compañera, le clave las uñas en la muñeca perforandole la piel, pues gracias a que solia afilarmelas en punta era más fácil clavarlas, y luego le retorci la muñeca.

Disculpa que me interponga en tu frase de salvador, pero la única que estaba molestando aqui es tu novia, yo solamente intentaba cenar algún que otro humano.

Suspire y roseplo, apartandome un mechón del pelo con el aire.

Al parecer, en este lugar sois todos unos malditos vampiros vegetarianos

Comente en voz alta, tal vez no se sintierán heridos, pero desde mi punto de vista era el peor insulto que podian hacerme.

No sabía si podría controlarme con esa vampira, pero eso no era todo, resonaba todavía en mis oídos que habían echado grandes cantidades de verbena en la bebida, por suerte yo no había tomado nada, pero sí Damon, y entendía que se estaría encontrando mal, iría a verlo en cuanto solucionara las cosas con la vampira pelirroja que tenía delante, pero antes de que pudiese decirle nada, Damon apareció a mi lado, cogiéndola él por el cuello.

Vi como la vampira iba a atacarle, y empujé a Damon al suelo con algo de fuerza vampírica y me interpuse entre ambos, ésta vez, mis sentimientos tomaron el control de mí. -No oses tocarle si quiera.-dije mientras le daba un gran empujón contra el suelo. Nunca me había comportado de esta manera, pero yo no quería que nadie dañara a mis seres queridos, eso jamás y menos si estaba yo delante para poder evitarlo.

La miré furiosa, deseaba matarla por lo que había podido hacerle a Damon en su estado, pero no debía dejarme llevar por mis instintos más primitivos, por lo que cogí aire y comencé a hablarle de nuevo. -No somos vegetarianos la verdad, pero tampoco somos asesinos, por algo existen las bolsas de sangre estúpida. Aquí no vas a hacer nada más, será mejor que te largues de aquí ahora, y mejor que no te vea de nuevo.-dije furiosa, sin darme cuenta, había puesto mi rostro de vampiro por la furia.

La vampirita no tardo mucho en interponerse entre el muchacho y yo.
Al parecer el joven no se encontraba con toda su vitalidad, pues a ella no le costo mucho trabajo separarlo de mi.
al parecer ella no habia tenido suficiente de mi parte, pues seguia buscandome las pulgas y acabo empujadome hacia el suelo, aquella cretina lo iba a pagar muy caro conmigo.
Antes de caer al suelo di una pequeña voltereta.

Tu! asquerosa vegetariana, has osado manchar mi traje nuevo.

Dije mientrás me ponia bien el traje y la miraba con cara de odio.

Jamás me han echado de una fiesta y no pienso comenzar hoy, porque a una estupida se le hayan cruzado los cables.

Observe como su rostro cambiaba al de vampiro, y parece ser que yo estaba equivocada, pues según ella se alimentaba con bolsas de sangre, lo que seguramente provocaria que fueramos más o menos del mismo poder.

Ya que ella pretendia no contenerse, yo no iba a ser menos, saque mis instintos vampiricos a relucir, mi expresión y mis dientes afilados, ya no mostraban la sensualidad de la anterior apariencia.

Estupida, no sabes lo que has hecho.

Antes de terminar la frase, ya estaba a su lado agarrandola del pelo con las uñas dispuestas a clavarselas en el cuello.

Deberías aprender a contener tu estupidez

Rara vez sacaba a la luz mi verdadero cáracter y apariencia, pero aquella tonta lo había conseguido muy rápidamente, y yo no era quien para contener mi instinto asesino.

La estúpida de la humana me estaba aburriendo ,y si fuera por mí, ya le hubiera matado como se merece. Pero en estos momentos eran otras cosas las que tenía que hacer.
Pero sus comentarios de Damon fueron las que me molestaron más que cualquier otra cosa”Amo”, esa palabra que había mencionado. –Damon cállate quieres, porque este no es el momento de que digas esas cosas. Además ya sabes lo que quiere Klaus, recuperar su verdadero cuerpo , y poder- me controle la furia que sentía en ese momento, ya que mi confidente, y adorada vampira estaba con nosotros. Mire a Kath, y le sonreí .
Por otra parte había otra estúpida vampira novata que peleaba con Elena, lo que faltaba.
-Basta con esto, no perdamos más tiempo. Acaso quieren que Klaus recupere su cuerpo, y lastime a los demás. Y tu lárgate , y has lo que Elena te dice- dije mirándole ala vampira pelirroja . Era por su bien que se largara , si no quería morir. Me pare al lado de Elena , y mire a Damon, Katherine, y ala humana que estaba ahí .
-Damon, yo iré por Klaus, y lo distraeré .Sé que no me hará daño , mientras que Katherine y tu salvaran a sus amigos que están allí. Y tu Elena ayudaras a los heridos junto a la humana Valerie.Ahh más vale que no hagas más preguntas porque si no yo misma me encargare de hacerte callar Valerie - termine mirando a todos los que estaban a mi lado,y di un suspiro.
Me di la media vuelta para luego desaparecer con mi velocidad vampírica. No quería perder más tiempo, quería impedir que Klaus recupere lo que más quería. En un instante llegue al lugar donde se encontraban , Klaus, Elijah, James, Aleksand, Reichen, Meredith.
No me importaba si en ese momento Klaus me matara, porque lo quería era salvar a los que estaban allí,para luego impedir el hechizo, así Klaus se quedara con ese cuerpo que no le sirve para nada. Para mí era muy fácil de hallar a Klaus.
-Klaus en buen momento llego, sabía que necesitabas de mi ayuda- dije parándome enfrente de él, mirándole a los ojos. Luego mire de reojo a los que estaban a su alrededor , y les guiñe el ojo.
Estaba fingiendo ofrecerle mi ayuda a Klaus, porque esa era la única forma de impedir lo que estaban a punto de hacer.

Todo paso tan rápido, pero no tarde mucho en recuperarme. Pero nadie nos podía vencer a nosotros, nadie. Además quieran o no ellos tenían que hacer lo que les decía mi hermano, porque era tan fácil matar a cualquiera de sus amigos.
-Si no hacen lo que mi hermano les ordeno matare a esta humana.Para mi será muy fácil beberme toda su sangre, y luego echarlo a la basura. Así que ahora mismo hagan el hechizo , y nadie saldrá herido -dije cogiéndola de los brazos, mientras mostraba mis colmillos .
Estaban tan apetitoso estar cerca de la humana, y si no hacían lo que les decíamos en 5 minutos mataría de verdad a la humana, o lo más fácil convertirla en una vampiro.
Mientras pasaba todo esto, la hibrida apareció ofreciendo su ayuda, pero no le creía nada, sabía que estaba tramando algo, pero al parecer llego muy tarde. Sonreí al verla parada enfrente de Klaus, es que ella no sabía lo que le esperaba .
Gracias a la llegada de la hibrida, pude sentir el aroma de los otros vampiros que venían.
-Klaus hermano deben apurarse esos brujos , porque los demás están muy cerca- mi voz había sonado muy serio, es que todo esto me estaba colmando la paciencia, y no quería agarrar uno por uno, y dejarlos tirados en el suelo sin una gota de sangre.

Aleksand estaba al borde del abismo, con la intención de hacer estallar todo su alrededor y dejar la mansión solo llevando a Meredith en sus brazos, ilesa. Elijah ya se recuperaba de su ataque sólo para volver a zumbar junto a su hermano cuales moscas alrededor de la comida. Muy bien, debía de entregarles la medalla de oro al esfuerzo y constancia por más molestas pestes que fueran. Por un segundo pudo jurar que hubo otro tipo de magia activándose en el lugar pero fue tan momentánea y fugaz que con su atención en la situación no pudo establecer de que se trataba. Las cosas allí tendían a querer irse de sus manos lo que a ojos de los demás lo ponía incluso más tenso con cada músculo tensándose hasta el posible desgarro. ¿Quién pensaría que su objetivo sería una de las personas que tenía en más estima? Las palabras estaban ya de sobra, nada ni nadie podía cambiar el próximo acto del terrible evento que se tramaba en la mansión Cromwell. Por supuesto aún había demasiadas variables a considerar, algunas incluso fuera del alcance de los grandes poderes, cálculos errados que costarían muy caro a todos los presentes.

El fuego volvió a encerrarlos, otro de los indicios de que la disgustante petición de Niklaus estaba completada. Estaba completa y absolutamente preparado para encargarse de James, el hechicero que con total valentía o estupidez había ido a por el a los golpes. Sin embargo este había acertado a la primera haciendo girar el rostro del rubio seguido de una patada al estomago que lo hizo inclinarse hacia adelante aferrándose a si mismo con todas sus fuerzas para disminuir el dolor ocasionado. El tiempo que se quedó inmóvil fue prolongado, lo suficiente para darle la oportunidad al demonio de usar su magia en ofensiva. Las flamas crispaban y ascendían con total fiereza, símbolo de un presagio pasado y futuro, de un lazo y una unión que se enfrentaba a los mismísimos infiernos,o quizás al juicio de los altos cielos. El cazador al fin alzó su mirada, a momento justo para que las estacas se detuviesen a centímetros de él en el propio aire. Había sido no más que un pulso de Poder, uno lo suficientemente fuerte para detener el ataque y poner el fuego a sus alrededores a arder como si hubiesen echado gasolina. Las estacas cayeron al piso luego de una breve suspensión en el aire, por alguna razón toda tensión había desaparecido del cuerpo de Aleksand y este reía con total libertad y sentimiento- Eres tu quien debe admitir que no tienes idea de lo que hablas- Como si fuese lo más natural del mundo el rubio se abalanzó sobre su, hace minutos, hermano en sentimiento. Lo que pareció en primera instancia como un puñetazo al maxilar se transformó en un cabezazo con todas las letras. Uno que hizo retroceder a ambos en direcciones opuestas. Un hilo de sangre brotaba de la cabeza del rubio como respuesta al impacto pero este aún sonreía incluso más que ante si era posible- Él me enseño de fuerzas que ignoraba por completo. Ahora comprendo que el corazón humano...- El viento se arremolinaba en todo su alrededor formando pequeños tornados que encontraban su tope en la cúpula de vivas llamas, alimentándose de ellas. No tardaron en convertirse en una pesadilla ardiente que poco a poco cubrían más el escaso terreno que había entre ambos.

Allí dentro el calor era abrazador si no fuera que ambos en realidad eran mucho más resistentes a sus efectos que cualquier humano normal que a estas alturas se habría convertido en un trozo grande de carbón. El sudor y sangre recorrían su rostro, una muestra de que aunque "libre" no podría actuar a gusto hasta que su cuerpo físico se amoldase al cambio pero no había tiempo para ello. James no daba tregua y con sus ojos llenándose de un negro, casi sin pupila, amenazaba con calmar la tormenta haciendo uso de sus poderes. El mero acto, la mínima acción por parte del hechicero con respecto al uso de aquella magia era como una directa bofetada y burla hacia el joven de ojos plateados. Un rayo cayó entre la distancia que los separaba, rompiendo el cielo flamígero que los envolvía por un mero instante. Una advertencia , y de hecho la única que llegaría. Al segundo siguiente sus manos expulsaban el elemento con la misma intensidad hacia James. La naturaleza tronaba con su propio sonido, en busca del balance propio, furiosa y con total razón. Desgraciadamente el hechicero se preparó para el ataque, desviándolo para que otro adefesio antinatural recibiera el impacto, Elijah Mikaelson. El vampiro original salió volando hasta un árbol cercano, con su cuerpo llenándose de espasmos periódicos, por supuesto no podía ser asesinado con aquello.

El Cromwell sonreía victorioso, ningún ataque parecía alcanzarlo, pero parecía que por un momento había olvidado un punto clave del lazo que los unía. No era la magia de círculo, no sus sentimientos, sino la esencia misma de sus poderes. La noche era testigo de aquello y la Luna Llena la principal benefactora. Aleksand arrancó su camisa de un solo tirón con la marca en su espalda llena de un brillo fuerte y casi celestial. Con total concentración extendió sus manos hacia el hechicero, con hilos de un color plata perfecto extendiéndose desde la punta de sus dedos a cada una de las marcas que compartían la Luna como símbolo- El corazón humano...¡Es capaz de brillar con luz propia!- El chico tiró de los hilos con la absoluta intención de terminar con la existencia oscura y James si era necesario. Su alma podría ser salvada, tendría su oportunidad de brillar en este mundo en uno de los tantos ciclos de reencarnación. Pero algo salió mal, un movimiento inesperado en su interior que no le permitió terminar su intención, moviendo los hilos que tejían la existencia del hechicero de una manera distinta. Pudo sentir los huesos del chico crujir como si se hicieran añicos aplastados por una enorme fuerza. Se escuchó un aullido en la noche y el fuego se extinguió al fin.

La marca en su espalda aun resplandecía casi con vida propia. De alguna manera Aleksand se las había apañado para mover los hilos de otra manera- Siempre ha sido acerca de juicios, entonces este será el primero y último que haré - escuchó aquella voz llena de inocencia volver a ocupar sus labios. Quizás le quedaba el tiempo para decir adiós pero aún estaba por verse el efecto que había causado en James.

Todo estaba saliendo perfecto al plan que teníamos, mi cuerpo pronto estaría terminado y la llegada de Valerie a mí ni me inmutó, gracias a mis fuentes, sabía que ahora era una traidora que estaba de parte de los hermanos Salvatore, pero jugaría a su juego un rato. -Bien Valerie mantente apartada de esto, al menos por el momento, luego tenemos que mantener tú y yo una conversación a solas.-dije con una sonrisa de lado.

Disfrutaba de ver el odio que había entre los dos brujos, la verdad es que eso era una situación bastante entretenida, esos dos parecía que iban a matarse, con sumo gusto pude ver como mi cuerpo estaba terminado y como nuevo, le puse una ropa que tenía en mi bolsa, un trae negro con corbata morada, y sentí como mi alma abandonaba el cuerpo de Tyler Lockwood y regresaba a su cuerpo.

-Ahora vuelvo a ser yo, por fin vuelvo con toda mi auténtica fuerza.-dije mientras me levantaba del suelo. Se sentía tan bien al estar en mi propio cuerpo de nuevo. -Elijah, nosotros ya hemos terminado por hoy, podemos marcharnos y dejar que estos dos resuelvan bien sus problemas juntos, ha sido un placer contar con vuestra relación.-dije mientras comencé a andar para marcharme de aquel lugar y planificar mis siguientes movimientos.

Off: Klaus abandona la fiesta.

No podía creer en lo que estaba sucediendo, Klaus había regresado a su cuerpo y se había marchado, volvía a ser un peligro para todos, pero no podíamos matarlo pues entonces nuestros amigos morirían, y eso no queríamos que sucediera. Elijah ya me soltó y me lancé a tratar de abordar el segundo problema que ahora mismo, es el que más me preocupaba.

Dos grandes amigos peleándose, James no era él si quiera, podía verlo en su mirada, pero no sólo fue eso lo que me asombró, sino que Alek, cuando se quitó la camiseta, una parte de él comenzó a brillar con una luz plateada, era increíble pero también inaudito, ¿qué sería eso? Y lo más preocupante era que no podía pararlo. Aún tenía a Artemisa en mi poder y la saqué.

Me puse en medio de ambos apuntando a uno y a otro con la lanza, sabía que Alek era el que iba de buenas pero eso que había hecho, fuera magia o lo que fuere. -¡JAMES! ¡Vuelve a ser tú ahora! no puedo dejar que dos amigos peleen como lo están haciendo, ya tenemos suficientes problemas como para que se nos causen más.-dije mientras apuntaba a James con Artemisa, que parecía alimentarse de la magia de alrededor y brillaba con un tono azulado, sentía una inmensa fuerza en ella.

No había tiempo para discutir, ni si quiera aunque una discusión con Damon valiera la pena, por algún razón, Katherine se lo pasaba genial discutiendo con Damon. Aún así, cuando Damon la preguntó si podía confiar en ella, la morena sonrió levemente. -Si te dijera que sí, que puedes confiar en mi, no me creerías. Pero ahora mismo no hay tiempo para estupideces. Están fuera, en el aparcamiento. - dijo informando a todo el grupito, que en aquel momento estaba formado por su amiga Valerie, una humana a la que no conocía, Damon y su querida doble. Katherine odiaba acatar ordenes de nadie, pero en aquel momento debía hacerlo, ya que su prioridad era frustrar los planes de Klaus. En cuanto Valerie se marchó, habiéndoles encomendado a cada uno su tarea, miró a Damon durante un segundo, y haciendo un leve movimiento de cabeza, le indicó que debían ir; no tardó nada en llegar al lugar donde se encontraban todos, tanto Klaus y Elijah como el grupo de brujos que estaban trayendo su cuerpo de vuelta.

Cuando Katherine llegó, la transición ya se había completado, y llegó justo a tiempo para ver a Klaus desaparecer del lugar, en el cuerpo en el que ella le había conocido. -¡Mierda! - Elijah seguía en el lugar, aunque Katherine no le había dirigido la mirada, aún así, no se acercó a Valerie, era mejor que los originales no supieran de su amistad. Por otra parte, James, el brujo al que había conocido en Chicago, estaba en una riña con otro brujo y, por lo que parecía, debían ser amigos. Aunque Katherine no se metió allí, pues aquello no tenía nada que ver con ella y era mejor mantenerse al margen. No podía creerse que ahora tuviera que volver a huir y esconderse de Klaus. ¿Cuantos años serían aquella vez? ¿Cuando volvería a tener una oportunidad como aquella? No quería ni pensarlo.

Todo salió muy bien. No había nada de que nos quejemos mi hermano y yo.
Ahora lo que seguía era hacer nuestro nuevo plan,y así poder hacer una pesadilla de la vida de todos de Mystic. Nada me molestaba hasta ahora, porque los brujos hicieron bien su trabajo, hasta que llego una vampira.Katherine. Si ella estaba allí, pero no hice nada, solo lo mire por unos segundos. No podía hacer en contra de ella ahora que mi hermano recupero su verdadero cuerpo, solo nos quedaba marcharnos del lugar.
Tire ala humana al piso, y los mire riéndome malévolamente a los que se encontraban a su alrededor, mientras escuchaba a mi hermano lo que le decía ala hibrida.
-Si Hermano nosotros no tenemos nada mas que hacer aquí, ellos son los que tienen que resolver sus cosas-por ultima vez mire a Katherine , y luego nos marchamos junto a mi hermano.

off. Ya me marche junto a Klaus de la fiesta.

Todo lo que había sucedido era bastante triste para mi, ya que no pude impedir lo que mas deseaba. Cuando llegue ya no podía hacer nada, porque ya estaba en transición. Cuando vi que todo estaba listo, que Klaus era el mismo de antes, con el mismo cuerpo, y con sus mismos poderes . Como maldecía no haber llegado unos minutos atrás, y así poder haber hecho lo que sea .
-Esta bien Klaus, me mantendré alejada de todo esto. Y descuida que esa conversación lo tendremos cuanto antes-conteste fingiendo estar de su lado. No podía ponerme a pelear con el ahora, porque todo empeoraría, y eso era lo que menos quería. Pero estaba segurísima de que la sabia toda, sabía que estaba del lado de los Salvatore, pero no lo temía, porque nada haría que vuelva a estar del lado de Klaus, de quien me hizo mucho daño.
Después de unos minutos mi amiga Kath llego, pero evite hablarla, ya que los originales estaban . Y no quería que ellos sepan que Kath era mi amiga.
De un momento a otro Elijah, y Klaus se marcharon del lugar, ya que ahora había logrado lo que querían . Me quede sentada en un rincón lleno de rabia, de tristeza, de no haber logrado lo que quería. Pero al lado estaban Aleksand , James, solo los mire de reojo. No quería meterme en ese asunto . Ahora quería largarme de esta fiesta, o mejor dicho a saciar mi sed, ya que estaba furiosa , y eso hacia que deseara mas que nunca la sangre humana.
-Kath, no pude hacer nada . Klaus recupero su cuerpo, y el poder que tenia. Pero te prometo que no huiras a partir de hoy, porque en esto estamos juntas si- dije levantándome del rincón, para luego abrazarla. Mientras tanto mire a Damon con una gran tristeza.
-Damon lamento mucho de no haber impedido para que Klaus no recuperara su cuerpo. Lo siento,pero es hora de que me vaya de esta fiesta . Tengo que ir a hablar con Klaus, eso es lo que me dijo antes de que se vaya, y tengo que hacerle caso para que no sospeche de que estoy del lado de ustedes-di un suspiro, los mire con una sonrisa cálida. Era la primera vez que sentía miedo , pero para que nadie se diera cuenta mostraba una sonrisa en el rostro.

La rubia nos estaba diciendo que podíamos hacer. Pero vamos ¿Qué se creía?¿La jefa? Cuando aquel chico me cogió supe que era uno de los de Damon. Era un vampiro a lo mismo que lo era Elena por su rapidez y su conversión en vampiresa, en una cosa en la que nunca me quería convertir. Quería soltarme pero sus habilidades y su fuerza era única, miré el rostro del chico que me tenía aguantada y suspire mirando a Damon, que seguro que el chico al que tenía encima me pondría los colmillos en mi cuello. Cuando el otro de aspecto diferente salió sonriente y seguro el chico quién me estaba agarrando para tomar mi sangre se fue con el otro. Al fin suspire y miré a Elena y a Damon, que casi se encontraban en el mismo sitio, escuché la voz de la otra Valerie y me crucé de brazos mirando a esta -A veces las cosas no salen como tal las planteamos Valerie- Me fui acercando a ella, se creía que era la mejor del mundo cosa que no era y que era mejor salir huyendo de aquel sitio para impedir que ese tal Klaus se fuera a por su ¿cuerpo? No entendía lo que estaba pasando, solté mis brazos y me acerqué a ella -¿Crees que ese chico confiará en ti? Ya lo has dicho no hay nada más que hacer. Ahora puedes irte. Fufu- Le hice una seña con mi mano como de irse.