Quién sabe, tal vez sea el destino [ Jen]

Las cenas cada vez se escasiavan en la noche, al parecer los humanos sabian como beneficiar su vida sin salir de noche pues era el perfecto momento para cazar sin tener que esconderse, el alimento estaba de dia ahora asi que solo me quedaba salir encapuchado para no sacar sospechas ni interés alguno en los humanos ni menos en la seguridad ciudadana.
Cogí la chaqueta que se encontraba tirada por el mueble abandonada para después coger los lentes de sol,la solucción del problema solar. Caminé lentamente en las calles de Mystic con las manos guardadas en los bolsillos de la chaqueta que traia puesta.

No era el momento indicado para poner en práctica mi cazeria pues estaba a la luz de todas las miradas asi que solo me quedaba esperar un poco hasta que el sol cayera en las montañas fronterizadas.Entré a la primera tienda disponible con la cabeza gacha me senté en una de las mesas lejanas de las ventanas;era una
cafeteria donde habia decidido descansar. Saqué un mapa donde tenia marcado el camino mas probable al bosque sin tomar desvios pero toda mi concentración se esfumo al segundo que logre visualizar a una hermosa mujer pelirroja entrar por la puerta principal. Me saque las gafas cuando me sentí seguro que aqui no pasaria
nada; la analize por un tiempo determinado, como no verla?, si ella necesitaba toda la atención que fuera posible en la tienda.

Después de un día espantoso en el instituto fui a casa para cambiarme de ropa. Me sentía agotada y con una sed terrible. Que sensación tan temible. En estas circunstancias nunca sabía como arreglármelas así que decidí probar una nueva táctica: Distraerme.

Tal vez si me distrajera no tendría tanta sed como ahora. Cogí mi bolso y me puse los cascos del MP3 y fui a dar una vuelta. Me dolía demasiado la cabeza, no se si era por el sol o por la sed pero no lo aguantaba. Necesitaba meterme en algún lugar. Vi una cafetería abierta. No había mucha gente, pero había un chico con una capucha. Siempre solía oler a la gente a mucha distancia, así podría ver si era humano o no. Con la sed que tenía no era muy difícil distinguir entre humanos y vampiros. Aquel chico no era un humano, no olía a la deliciosa sangre que suele recorrer las arterias de los humanos. ¿Era un vampiro? Últimamente había visto algunos vampiros en la ciudad, pero a el aun no lo había visto, eso seguro, si no me acordaría.

Sonreí a aquel chico, ya que me estaba mirando, y me senté en una de las mesas que estaba al rededor. Necesitaba sangre si o si, así que decidí pedir café para poder calmar la sed.

Todo alrededor enmandaba un dulce ahora del humano, en estos momentos sabia como es que el vampiro que me habia convertido gustoso anhelo mi aroma, y esto era igual.Saque a cuentas las posibilidades que podia tener si arrasaba con toda la clientela, pero no era el único. La muchacha que habia captado mi atención estaba en problemas; lo supé despues de un determinado momento pues no tenia el dulce aroma de un humano.

Se sentó en una de las mesas cercanas, me quede observandola mientras que debutaba si acercarme o no, pero me fui a la posible opción . Moví lentamente la silla que se encontraba cerca a su mesa y con una sonrisa en los labios le dije - puedo sentarme ? - le pregunté era el momento perfecto para conocer a "personas " que tuvieran el mismo problema que trato de aguantarlo.

Ordené rapidez al camarero. El en un minuto ya estaba dándome el café que le había pedido. El chico de la mesa de al lado seguía mirando hasta que se acercó y me preguntó si podía sentarme. Seguía con la chaqueta y la capucha puesta. Su sonrisa era preciosa, pero al saber que era vampiro seguro que no era muy amable. Llevaba 350 años conociendo a vampiros y solo el 5% de ellos eran amigables, dudaba mucho que el chico que tenía al lado lo fuera.

-Claro. -Le dije con una gran sonrisa. ¿Quién iba a perder una oportunidad de conocer a otro vampiro? Yo no, eso seguro.- Me llamo Jen.

Tome un sorbo de aquel café, nada, no me calmaba la sed y me dolía aun más la cabeza. Menudo día me esperaba, necesitaba sangre.

Off: lamento si no puse el color donde se debe es que estoy por el celular xD

Por un momento pense que la vampira me rechazaria pero fue todo lo contrario,antes de sentarme en la mesa respectiva el camarero pase a mi lado por el pedido,solo basto el ligero aroma para ponerme rigido de golpe.Despues que se fue trate de recomponerme pues no queria dar la primera impresion a una bella vampira la cual al parecer tendria un buen tiempo en este estado,sin embargo no me tire para atras y segui caminando hacia ella .

Al escuchar su respuesta a mi pregunta con el regalo de su sonrisa ,le devolvi la sonrisa,con movimientos seguros me sente en la silla que daba frente a ella.
Observe en sus ojos sus pupilas dilatadas llendose ya al color negro, me alivie un poco al saber que estabamos en las mismas condiciones -mm es un placer Jen,soy Ryan - la observe tomar un poco de su cafe para luego visualizar el cambio brusco en su rostro,me incline un poco apoyado de la mesa para acercarme a ella - aguntarias un poco mas aqui?, o preferias ir conmigo por algo de comida ?- sonrei de lado esperando que entendiera lo que habia tratado de decirle sin qunadie mas lo haya captado o escuchado.

El chico se presentó como Ryan. Parecía amable y se fijaba en todo lo que hacía. Tal vez era su costumbre ver todos los movimientos de la gente al igual que yo o tal vez se me notaba demasiado que me moría de hambre y mis ojos me estaban dando malas pasadas. Ryan se ofreció para acompañarme a "Comer algo". Entendía a que se refería, pero es que no se a que se refería con lo de "comer" ¿Animal? ¿Humano? Así que me acerqué a el un poco más para que nadie me escuchara.

-No ataco a los humanos. -Le susurré- Mi cargo de conciencia es más fuerte que mi sangre. -Le dije con una sonrisa.

Al principio, cuando me convirtieron, no me quedaba otra que atacar a los humanos, pero después de ver el daño que hacía decidí coger un camino más seguro, como las despensas de sangre en el hospital o a una mala los animales.

Los segundos pasaban para solo consumirme mas a la agonia.Esperaba una respuesta inmediata por su parte y asi fue aunque senti vacilacion por lo que dijo.Escuche lo que me dijo en respuesta,ella no mataba a los humanos asi que de que se alimentaba?de animales acaso? tal vez? mientras que yo de humano,si es que no me traian servida el almuerzo mediante un vaso o una bolsas voluntarias del hospital. Solo habria acabado con la vida de dos personas por mi falta de control , sin embargo poco a poco trataba de sobrellevarlo lo mejor posible .

Lo mire confundido - Si no matas a los humanos para alimentarte,entonces de que sobrevives? - le pregunte normal,sin bajar el volumen de mi voz - Por que la unica manera de satisfacer mi ansiedad es con los humanos,ademas es la unica forma que se que no debilita- tal vez Jen podria orientarme para no sacrificar a mas personas que elegia,la mayoria eran personas que deberian estar muertas por un comienzo asi que con gusto lo hacia ya sea por la manera antigua o moderna que para mi eran porquerias que no deberian existir - Pero que dices si mejor salimos de aqui y me muestras lo que sabes hacer - sonrei divertido

A Ryan se le veía confuso. Creo que no se esperaba esa respuesta por mi parte. Tal vez parecía ese tipo de vampiro que ataca sin pensárselo dos veces, pero era todo lo contrario. Había aprendido a controlar muy bien mi sed y prefería morir a atacar a un humano inocente. Llevaba viviendo 350 años y es verdad que en muchos años tuve que atacar a los humanos, pero desde que empezaron a existir las despensas de sangre en los hospitales mi vida había sido más fácil y llevadera.

-¿No has odio hablar de las despensas del hospital? -Le dije susurrando- No haces daño y no te debilitas. -Por su gesto en la cara tampoco se esperaba esa respuesta y tampoco le podía culpar de ello. Los pocos vampiros que había conocido en el poco tiempo que llevaba allí no les importaba matar a nadie para conseguir la sangre y a mi eso me daba mucha pena. Ryan me invitó a salir de aquel sitio para enseñarle lo que sabía hacer. No sabía a que se refería exactamente, pero seguro que sería muy divertido.- Claro, vamos.